Se guarda en el Centro de Documentación de la Imagen de Santander (C.D.I.S.).
Esta imagen y la siguiente son porciones de una fotografía panorámica de la ribera sur de la bahía, titulada "Bahía de Santander", cuya autoría se desconoce. Forma parte del gran fondo fotográfico que Victor del Campo Cruz (1903-1965) fue atesorando a lo largo de su vida, como coleccionista y como fotógrafo aficionado, ya que su dedicación profesional fue la gerencia de los antiguos "Almacenes Ródenas", de Santander.
Este fondo lo componen más de 2.500 imágenes y objetos fotográficos y fue donado en 2006 por sus herederas al Centro de Documentación de la Imagen de Santander (C.D.I.S.), para que pudiera ser contemplado por todos los ciudadanos. A la labor de investigación, catalogación y divulgación que realiza esta institución, dependiente del Ayuntamiento de Santander, se debe el que hoy podamos disfrutar de este interesante documento.
Gracias al trabajo de una de sus investigadoras, la técnico Maria Valdeolivas Abad, que fue quien consiguió identificarla (a pesar de su baja calidad y a los cambios habidos en el paisaje), ha podido saberse que la imagen original se conserva en papel (13 x 18 cms.) y que debió obtenerse mediante un procedimiento denominado "gelatina de revelado químico virado" (de ahí su color amarillento), a partir de un negativo en vidrio, que no se ha conservado.
No se conoce el autor de la fotografía, aunque, se cree que podría haber sido obra del propio coleccionista, que es quien la dató como hecha en 1912. A esta idea contribuye también el que Victor del Campo Cruz, en su faceta de fotógrafo aficionado, llevase a cabo toda su producción, hasta 1940, utilizando el vidrio como soporte de los negativos.
Este fondo lo componen más de 2.500 imágenes y objetos fotográficos y fue donado en 2006 por sus herederas al Centro de Documentación de la Imagen de Santander (C.D.I.S.), para que pudiera ser contemplado por todos los ciudadanos. A la labor de investigación, catalogación y divulgación que realiza esta institución, dependiente del Ayuntamiento de Santander, se debe el que hoy podamos disfrutar de este interesante documento.
Gracias al trabajo de una de sus investigadoras, la técnico Maria Valdeolivas Abad, que fue quien consiguió identificarla (a pesar de su baja calidad y a los cambios habidos en el paisaje), ha podido saberse que la imagen original se conserva en papel (13 x 18 cms.) y que debió obtenerse mediante un procedimiento denominado "gelatina de revelado químico virado" (de ahí su color amarillento), a partir de un negativo en vidrio, que no se ha conservado.
No se conoce el autor de la fotografía, aunque, se cree que podría haber sido obra del propio coleccionista, que es quien la dató como hecha en 1912. A esta idea contribuye también el que Victor del Campo Cruz, en su faceta de fotógrafo aficionado, llevase a cabo toda su producción, hasta 1940, utilizando el vidrio como soporte de los negativos.
Para realizar esta fotografía el autor debió emplazar su cámara en un lugar elevado de Santander, en la parte alta de San Martín o en sus inmediaciones y pese a la poca luminosidad del día elegido para hacerla y a los condicionantes técnicos de la época; consiguió inmortalizar la fachada marítima de Pedreña un día de 1912, a la hora de la pleamar.
La foto recoge algunos de los rincones más emblemáticos de la Punta de Pedreña, como la Peña de El Rostro, que puede apreciarse al completo (antes de su excavación), el perfil de la Peña Aguda, la profundidad de la ensenada de la Barquería (que llegaba casi hasta el barrio de La Valle), el Camino Real (que moría en el antiguo embarcadero), los comienzos del Muelle de la "T" (todavía sin dásenas al este y al oeste), etc. Lugares, todos ellos, cuyas características hoy resultarían difíciles de imaginar en su aspecto original, por la progresiva urbanización que han sufrido con el paso del tiempo.
Las condiciones de habitabilidad debían ser muy duras entonces en la Punta de Pedreña: una pequeña peninsula orientada al norte, incrustada en la bahía de Santander, sin apenas arbolado y batida por todos los vientos. No es extraño que sean muy pocas las edificaciones que se observan. Unas ocupadas sólo en verano por algunas familias adineradas (como la casona del conde Scláfani y la casa-palacio de los Pérez del Molino) y otras correspondientes a personas que desempeñaban oficios relacionados con el puerto o con la seguridad de éste (como la casa-taberna situada frente al embarcadero, la casa de Manuel Bedia Castanedo, patriarca de "Los Diez Hermanos" o el Cuartel de Carabineros, estratégicamente levantado sobre la Peña de El Rostro).
El conjunto principal de casas de lo que entonces se denominaba Ambojo no se aprecia en esta imagen, porque estaba situado en la zona centro-este y sur de lo que hoy es el pueblo de Pedreña. En esa ubicación la viviendas estaban más resguardadas por el relieve del terreno y tenían mejor insolación. Además, allí se encontraban cerca de las tierras de cultivo y tenían buena conexión con el principal fondeadero de embarcaciones (que estaba en la ensenada de La Barquería -de ahí su nombre-) y con el Camino Real.
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| "Bahía de Santander". 1912. COL. VÍCTOR DEL CAMPO CRUZ. C.D.I.S. |
Para conocer estos detalles y otros nuevos, pendientes de descubrir, es necesario acudir al C.D.I.S. y obtener una copia de esta imagen con una resolución mucho más alta que la que podemos ofrecer aquí, por las restricciones legales y los limites del formato de este blog.
Es la fotografía más antigua que conozco del pueblo, de ahí el título del comentario. Pero este título no implica que no puedan conservarse otras realizadas antes. En realidad, sólo pretende "provocar" a quienes posean imágenes de similar o mayor antiguedad, intentando que se animen a compartirlas y así podamos disfrutar todos de ellas.
JMGB_2019.
